lunes, 3 de febrero de 2020

Anna Karina, Jean Seberg, Brigitte Bardot, Maruschka Detmers... musas de Jean-Luc Godard (XI)

Sorpresas encantadas

Chantal Goya, la reticente
Goya/Godard. ¿Una historia en abundancia? En el papel de la bonita ingenua, la inmaculada y deliciosa cantante Chantal Goya, de 23 años y ya con su facultad comunicante. Primera vez frente a la cámara para la aprendiz yéyé, cuya carrera cinematográfica se esfumará. La película, se llama Masculino femenino (Masculin féminin) y se estrenará en marzo de 1966. Después del romanticismo solar de Pierrot el loco (Pierrot le fou, 1965), Godard, rey de los contrarios, quería regresar a París, a un cine de dormitorio, en blanco y negro, para tomar el pulso de esta juventud al comienzo de la ebullición, "los hijos de Marx y Coca-Cola", como dice un famoso y sibilino intertítulo de la película.

Chantal Goya y Jean Pierre Leaud en Masculino, femenino (1965)
¿Podemos hablar de un ícono de Godard al referirnos a Chantal Goya? No realmente. Sobre todo, es ella misma, una joven de los años 1960 que sueña con su primer sencillo de 45 revoluciones, reacia a los avances de su compañero Jean-Pierre Léaud y que se niega a jugar a muñecas de cera para Jean-Luc Godard. Su mentor es Jean-Jacques Debout, con quien firma la banda sonora. Ella se casará con él justo después del rodaje, vivió en retrospectiva, como solía decir: "En un momento, Godard quería que me desnudara en el baño, con un vidrio esmerilado. Marlène [Jobert] tuvo que ir a la ducha, luego yo. Le digo a Marlene: “¿Puedes desnudarte? - Oh sí, no me importa. Mi cuerpo es como un pedazo de madera, me importa un comino. - Ah bueno? Bueno, no puedo, estoy bloqueada”. Así que me escondí debajo del bidé y Marlène regresó varias veces con su flequillo para fingir ser yo. Godard se da cuenta y me dice: "Nunca serás una estrella si no te desnudas. - ¡Me da igual! Ya tengo una estrella en casa: ¡mi lavadora!" ¡Oh si! ella es inteligente.
(cont.)

No hay comentarios:

Publicar un comentario