jueves, 31 de enero de 2013

Efemérides musicales y cinematográficas: Wolfgang Amadeus Mozart

El 27 de enero de 1756: nace Wolfgang Amadeus Mozart, cuyo nombre completo era Johannes Chrysostomus Wolfgangus Theophilus Mozart, en Salzburgo,  fue un compositor y pianista austriaco, maestro del Clasicismo, considerado como uno de los músicos más influyentes y destacados de la historia.
La obra mozartiana abarca todos los géneros musicales de su época y alcanza más de seiscientas creaciones, en su mayoría reconocidas como obras maestras de la música sinfónica, concertante, de cámara, para piano, operística y coral, logrando una popularidad y difusión universales.
En su niñez más temprana en Salzburgo, Mozart mostró una capacidad prodigiosa en el dominio de instrumentos de teclado y del violín. Con tan solo cinco años ya componía obras musicales y sus interpretaciones eran del aprecio de la aristocracia y realeza europea. A los diecisiete años fue contratado como músico en la corte de Salzburgo, pero su inquietud le llevó a viajar en busca de una mejor posición, siempre componiendo de forma prolífica. Durante su visita a Viena en 1781, tras ser despedido de su puesto en la corte, decidió instalarse en esta ciudad donde alcanzó la fama que mantuvo el resto de su vida, a pesar de pasar por situaciones financieras difíciles. En sus años finales, compuso muchas de sus sinfonías, conciertos y óperas más conocidas, así como su Réquiem. Las circunstancias de su temprana muerte han sido objeto de numerosas especulaciones y elevadas a la categoría de mito.
En palabras de críticos de música como Nicholas Till, Mozart siempre aprendía vorazmente de otros músicos y desarrolló un esplendor y una madurez de estilo que abarcó desde la luz y la elegancia, a la oscuridad y la pasión —todo bien fundado por una visión de la humanidad «redimida por el arte, perdonada y reconciliada con la naturaleza y lo absoluto»—. Su influencia en toda la música occidental posterior es profunda; Ludwig van Beethoven escribió sus primeras composiciones a la sombra de Mozart, de quien Joseph Haydn escribió que "la posteridad no verá tal talento otra vez en cien años". 

Y, por supuesto, un genio de esta envergadura no podía faltar en el cine. Su vida pero sobre todo su obra han aparecido en algunas películas, veamos algunas de ellas.
  • Zehn Minuten Mozart (Ten Minutes with Mozart, 1930) de Lotte Reiniger, cortometraje animado que desarrolla una historia utilizando únicamente composiciones de Mozart.


  • Mozart-Aufzeichnungen einer Jugend (Mozart, las grabaciones de juventud, 1976) de Klaus Kirschner, Realizado para la televisión alemana, este semi-documental sobre la vida de Wolfang Amadeus Mozart consta de las cartas escritas por el compositor mientras los artistas actúan al margen de los acontecimientos que aparecen en pantalla. La película cubre la producción creativa de Mozart entre los siete y los veinte años. 


  • From Mao to Mozart: Isaac Stern in China (1979) de Murray Lerner. Documental. Retrata la entrada de la cultura occidental en China, a través de los conciertos que dio Isaac Stern, el primer violinista que visitó el país y colaborador de la China Central Symphony Society.


  • Bröderna Mozart (Los Hermanos Mozart, 1986) dirigida por Suzanne Osten. El tema de la película es la vida del artista, el veneno del teatro, vivir para el teatro y nada más que para él. Una compañía teatral está preparando una nueva producción de Don Giovanni de Mozart, bajo la dirección de un joven y prometedor director, de revolucionarias ideas en cuanto al montaje escénico. Sus innovaciones provocan enfrentamientos con los artistas aunque su magnetismo personal les obliga, sin embargo, a seguir sus deseos y la ópera se convierte en una gran producción.


  • For Ever Mozart (Por siempre Mozart, 1996) de Jean-Luc Godard. Una compañía francesa de teatro se propone representar una obra en Sarajevo, pero sus miembros son capturados y recluidos en un campo de prisioneros de guerra. Entonces pedirán ayuda a sus amigos más influyentes para que gestionen su liberación.


  • Peterburgskiy dnevnik: Mozart. Rekviem (TV) (El diario de San Petersburgo. Mozart. Réquiem (TV), 2003) de Alexander Sokurov. Documental. El estreno del Requiem de Mozart organizado por Sokurov, bajo la dirección de Valentina Kopylova-Pantchenko y con los coros "Rossica" de San Petersburgo, tuvo lugar en la Filarmónica de San Petersburgo a finales de 2003. El coro desempeña un papel esencial, es el actor principal. 
  • Mozart in China (Mozart en China, 2008) de Bernd Neuburger, Nadja Seelich. Danny y Ly Wei, dos niños de diez años que viven en Salzburgo, pasan un verano lleno de aventuras en Hainan, una isla meridional de China. Con la ayuda de una obra Mozart y de una princesa china se las arreglarán para salvar un viejo teatro codiciado por una cadena hotelera.


Mención aparte merece Amadeus (1986) de Milos Forman, Impresionante adaptación de la obra de Shaffer sobre la vida de W.A. Mozart, narrada a través de un Salieri -inmenso Murray Abraham- consumido por los celos artísticos ante tanto talento. El cine tiene aquí el mejor retrato de uno de los más comunes de los sentimientos humanos: la admiración con espuma de envidia. Como muestra de inigualable sutileza, atención a la escena en la que Salieri encuentra un manuscrito inédito y sin tachaduras de Mozart... Por lo demás, 8 Oscar consagraron una de las mejores películas de los años ochenta.
La trama es la siguiente: Antonio Salieri es el músico más destacado de la corte del Emperador José II de Austria. Entregado completamente a la música, le promete a Dios humildad y castidad si, a cambio, conserva sus extraordinarias dotes musicales. Pero, después de la llegada a la corte de un joven llamado Wolfang Amadeus Mozart, Salieri queda relegado a un segundo plano. Enfurecido por la pérdida de protagonismo, hará todo lo posible para arruinar la carrera del músico de Salzburgo. Mientras tanto, Mozart, ajeno a las maquinaciones de Salieri, sorprende a todos con su genialidad como músico, pero también con sus excentricidades.


miércoles, 30 de enero de 2013

Noticias de libro: Fábulas del sentimiento

Fábulas del sentimiento

De Luis Mateo Díez, reúne doce historias en las que conviven la suerte de vivir, la desgracia de hacerlo, el placer, el dolor, el amor, la amistad, la soledad, la culpa, la felicidad, el desamparo, la envidia, los sueños y las quimeras.
Son doce historias que podrían partir de preguntas que conciernen a cualquiera; cuestiones que buscan respuestas verdaderas (las que solo pueden ofrecerse desde el territorio de la ficción) a temas universales. Lo hacen mediante piezas bien medidas y mejor resueltas, agrupadas ahora por vez primera en un volumen unitario que las dota de su sentido final.
Luis Mateo Díez (León, 1942) es autor de, entre otras, las novelas La fuente de la edad (1986), con la que obtuvo el Premio Nacional de Literatura y el Premio de la Crítica; El expediente del náufrago (1992), Camino de perdición (1995), La mirada del alma (1997), El paraíso de los mortales (1998), Días del desván (1999), Fantasmas del invierno (2004) y Azul serenidad o la muerte de los seres queridos (2010).

Noticias de libro: La facción canibal

La facción canibal

Arte, terror y radicalismo político
Publicación del libro La facción caníbal. Historia del vandalismo ilustrado (La Felguera Editores), una suerte de cartografía en torno al arte, el terror y el radicalismo político en la que Servando Ochoa describe la fascinación del arte por el crimen que sintieron, entre otros, Lord George Gordon o Walter Benjamin, Robespierre o Malcolm McLaren, Saint-Just o Guy Debord, y se adentra en las sesiones nocturnas de los clandestinos Clubs del Fuego Infernal o en los crímenes de Jack el Destripador.

Películas de la semana: 25 de enero

El lado bueno de las cosas

Título original: Silver linings playbook. Dirección: David O. Russell. País: USA. Año: 2012. Duración: 122 min. Género: Comedia dramática, romance. Interpretación: Bradley Cooper  (Pat), Jennifer Lawrence (Tiffany), Robert De Niro (Sr. Pat), Jacki Weaver  (Dolores), Chris Tucker (Danny), Julia Stiles (Veronica), Shea Whigham (Jake), John Ortiz (Ronnie). Guion: David O. Russell; basado en la novela de Matthew Quick. Producción: Bruce Cohen, Donna Gigliotti y Jonathan Gordon. Música: Danny Elfman. Fotografía: Masanobu Takayanagi. Montaje: Jay Cassidy y Crispin Struthers. Diseño de producción: Judy Becker. Vestuario: Mark Bridges. Distribuidora: eOne Films Spain. Estreno en USA: 25 Diciembre 2012. Estreno en España: 25 Enero 2013. Calificación por edades: No recomendada para menores de 12 años. Sinopsis:En El lado bueno de las cosas, el profesor Pat (Bradley Cooper) vuelve a casa con sus padres después de una estancia en una institución mental, e intenta reconciliarse con su ex mujer. Las cosas se vuelven más desafiantes cuando Pat conoce a Tiffany (Jennifer Lawrence), una chica con sus propios problemas.

El vuelo

Título original: Flight. Dirección: Robert Zemeckis. País: USA. Año: 2012. Duración: 138 min. Género: Drama. Interpretación: Denzel Washington (Whip Whitaker), Kelly Reilly (Nicole Maggen), Don Cheadle (Hugh Lang), Bruce Greenwood (Charlie Anderson), Brian Geraghty (Ken Evans), Melissa Leo (Ellen Block), John Goodman (Harling Mays), Nadine Velazquez (Katerina), Tamara Tunie (Margaret Thomason), James Badge Dale, Garcelle Beauvais (Deana). Guion: John Gatins. Producción: Laurie MacDonald, Jack Rapke, Robert Zemeckis, Steve Starkey y Walter F. Parkes. Música: Alan Silvestri. Fotografía: Don Burgess. Montaje: Jeremiah O’Driscoll. Diseño de producción: Nelson Coates. Vestuario: Louise Frogley. Distribuidora: Tripictures. Estreno en USA: 2 Noviembre 2012. Estreno en España: 25 Enero 2013. Calificación por edades: No recomendada para menores de 12 años. Sinopsis:En El vuelo (Flight), Whip Whitaker (Denzel Washington) es un experimentado piloto de avión que consigue realizar un milagroso aterrizaje forzoso salvando a casi todos los pasajeros de un vuelo. Después del accidente, Whip se convierte en un héroe, pero según se va desarrollando la investigación, van surgiendo muchas preguntas sobre lo que sucedió exactamente.

Movie 43

Dirección: Elizabeth Banks, Steven Brill, Steve Carr, Rusty Cundieff, James Duffy, Griffin Dunne, Peter Farrelly, Patrik Forsberg, James Gunn, Bob Odenkirk, Brett Ratner, Jonathan van Tulleken. País: USA. Año: 2013. Duración: 97 min. Género: Comedia. Interpretación: Emma Stone (Veronica), Gerard Butler (duende), Hugh Jackman (Davis), Elizabeth Banks (Amy), Dennis Quaid (Charlie), Chloë Grace Moretz (Amanda), Kristen Bell  (Supergirl), Anna Faris (Vanessa), Naomi Watts (Samantha), Kate Winslet (Beth), Uma Thurman (Lois Lane), Halle Berry (Emily), Josh Duhamel (Anson), Richard Gere (jefe), Kate Bosworth (Arlene), Chris Pratt (Jason), Jason Sudeikis (Batman), Kieran Culkin  (Neil), Patrick Warburton (padre), Christopher Mintz-Plasse (Mikey), Justin Long (Robin), Liev Schreiber (Robert), Johnny Knoxville (Pete), Terrence Howard (entrenador), Aasif Mandvi (Robert), Leslie Bibb (Wonder Woman), Seann William Scott (Brian), Bobby Cannavale (Superman), Jimmy Bennett (Nathan), Greg Kinnear (Griffin). Guion: Will Carlough, Steve Baker, Patrik Forsberg, Matthew Alec Portenoy, Greg Pritikin, Rocky Russo, Jeremy Sosenko y Elizabeth Wright Shapiro. Producción: Ryan Kavanaugh, John Penotti, Charles B. Wessler y Peter Farrelly. Música: William Goodrum. Fotografía: Frank G. DeMarco, Steve Gainer, William Rexer y Tim Suhrstedt. Montaje: Jon Corn, Debra Chiate, Craig Herring, Patrick J. Don Vito, Jason Macdonald, Sam Seig, Cara Silverman, Paul Zucker, Hakan Wärn y Sandy S. Solowitz. Diseño de producción: Tim Burgin, Toby Corbett, Russell Barnes, Robb Wilson King y Arlan Jay Vetter. Vestuario: Roseanne Fiedler, Nancy Ceo, Sydney Maresca, Kerrie Kordowski, Salvador Pérez Jr. y Judianne Makovsky. Distribuidora: DeAPlaneta. Estreno en USA: 25 Enero 2013. Estreno en España: 25 Enero 2013. Calificación por edades: No recomendada para menores de 18 años. Sinopsis: Una irreverente comedia cuyo reparto coral incluye algunos de los nombres más sonados de Hollywood. Se trata de una película no apta para todas las sensibilidades, en la que se entrelazan historias chocantes o incluso perturbadoras, pero siempre divertidas, que hay que ver para creer.

La banda Picasso

Dirección y guion: Fernando Colomo. País: España. Año: 2013. Duración: 100 min. Género: Comedia. Interpretación: Ignacio Mateos (Pablo Picasso), Pierre Bénézit (Guillaume Apollinaire), Lionel Abelanski (Max Jacob), Raphaëlle Agogué (Fernande Olivier), Jordi Vilches (Manolo Hugué), Louise Monot (Marie Laurencin), Stanley Weber (George Braque), Alexis Michalik (El Barón). Producción: Beatriz de la Gándara. Música: Juan Bardem. Fotografía: José Luis Alcaine. Montaje: María Lara y Antonio Lara. Dirección artística: Patrice Vermette. Vestuario: Vicente Ruiz. Distribuidora: Alta Classics. Estreno en España: 25 Enero 2013. Calificación por edades: No recomendada para menores de 7 años. Sinopsis: París, 1911. La Gioconda desaparece del Louvre. Pablo Picasso y Guillaume Apollinaire son detenidos y enfrentados. Pablo recuerda cómo Guillaume le había presentado a un atlético joven a quien llaman El Barón y que, al enterarse de su fascinación por unas estatuas ibéricas, decide robarlas del Louvre y vendérselas a un precio ridículo. Aquellas estatuas fueron cuatro años antes la inspiración del primer cuadro cubista, “Las señoritas de Avignon”. Pablo es español, Guillaume es polaco y El Barón es belga. Y la prensa habla de una banda internacional llegada a Francia para desvalijar los museos. “La banda Picasso” está basada en la historia real del robo de “La Gioconda” del Museo del Louvre en 1911; a raíz de aquel hecho, Pablo Picasso y Guillaume Apollinaire fueron detenidos y acusados de cometer el delito.

Bestias del sur salvaje

Título original: Beasts of the southern wild. Dirección: Benh Zeitlin. País: USA. Año: 2012. Duración: 92 min. Género: Drama, fantasía. Interpretación: Quvenzhané Wallis (Hushpuppy), Dwight Henry (Wink), Levy Easterly (Jean), Lowell Landes (Walrus), Pamela Harper (Little Jo), Gina Montana (Miss Bathsheba), Amber Henry (LZA), Jonshel Alexander (Joy), Joseph Brown (Winston). Guion: Lucy Alibar y Benh Zeitlin; basado en la obra Juicy and delicious, de Lucy Alibar. Producción: Michael Gottwald, Dan Janvey y Josh Penn. Música: Dan Romer y Benh Zeitlin. Fotografía: Ben Richardson. Montaje: Crockett Doob y Affonso Gonçalves. Diseño de producción: Alex DiGerlando. Vestuario: Stephani Lewis. Distribuidora: Golem. Estreno en USA: 27 Junio 2012. Estreno en España: 25 Enero 2013. Calificación por edades: No recomendada para menores de 7 años. Sinopsis: La historia de Bestias del sur salvaje nos traslada a una olvidada y orgullosa comunidad, instalada en una zona pantanosa formada por los meandros del río Mississippi, apartada del mundo por un inmenso dique, donde la pequeña Hushpuppy, de seis años, está a punto de quedarse huérfana. Hace tiempo que su madre se fue, y su adorado y alocado padre siempre está de juerga. Hushpuppy debe arreglárselas como puede en medio de la nada, rodeada de animales semisalvajes. Percibe la naturaleza como una frágil red poblada de cosas que viven, respiran y expelen agua, y que el universo depende de que todo encaje a la perfección. Pero cuando una tormenta eleva las aguas alrededor de su pueblo, su papá enferma de pronto, y Hushpuppy descubre que el orden natural que tanto ama está a punto de derrumbarse. En un intento desesperado por reparar la estructura del mundo y así salvar a su padre y su hogar, esta diminuta heroína deberá aprender a sobrevivir a una catástrofe imparable de proporciones épicas.

Proyecto Nim

Título original: Project Nim. Dirección: James Marsh. Países: Reino Unido y USA. Año: 2011. Duración: 93 min. Género: Documental. Guion: Elizabeth Hess. Producción: Simon Chinn. Música: Dickon Hinchliffe. Fotografía: Michael Simmonds. Montaje: Jinx Godfrey. Distribuidora: A Contracorriente Films. Estreno en Reino Unido: 12 Agosto 2011. Estreno en España: 25 Enero 2013. Sinopsis: Nim es el nombre de un chimpancé que, en la década de los 70, se convirtió en el centro de un experimento que tuvo como objetivo probar qué pasaría si un mono fuese criado y alimentado como un ser humano. Un viaje extraordinario a través de la sociedad y el impacto imborrable que causó Nim en la gente con la que se cruzó. Proyecto Nim es la biografía de un animal al que tratamos de convertir en humano.

Il villaggio di cartone

Dirección y guion: Ermanno Olmi. País: Italia. Año: 2011. Duración: 87 min. Género: Drama. Interpretación: Michael Lonsdale (sacerdote), Rutger Hauer (sacristán), Massimo De Francovich (doctor), Alessandro Haber, Irma Pino Viney (Magdahà), Fátima Alì (Fátima). Producción: Luigi Musini. Música: Sofia Gubaidulina. Fotografía: Fabio Olmi. Montaje: Paolo Cottignola. Diseño de producción: Giuseppe Pirrotta. Vestuario: Maurizio Millenotti. Distribuidora: Paco Poch Cinema. Estreno en Italia: 7 Octubre 2011. Estreno en España: 25 Enero 2013. Sinopsis: En Il villaggio di cartone, un anciano sacerdote observa, con impotencia, la desacralización de su parroquia, que tiene que cerrar las puertas a causa de la ausencia de fieles y de las desavenencias con el sacristán. Todos los elementos de culto de la iglesia se retiran, incluso el gran crucifijo del altar. El párroco se resiste a abandonar lo que había sido su casa al mismo tiempo que experimenta una crisis de fe. Esa misma noche, un grupo de inmigrantes clandestinos procedentes del norte de África se refugian dentro de la iglesia, ya desmantelada. El sacerdote decide concederles asilo y protegerles lo mejor que puede, prohibiendo la entrada a las fuerzas de seguridad. Totalmente dedicado al deber de solidaridad, el cura se entregará a los indigentes hasta agotar sus últimas fuerzas. Su vida, que hasta entonces reposaba en la palabra de Dios, toma una nueva dirección con el acto de la caridad. «Cuando la caridad es un riesgo, es el momento de la caridad», dice. Descubre así el poder del bien más allá de la fe y el verdadero significado de la vida.

Coriolanus

Dirección: Ralph Fiennes. País: Reino Unido. Año: 2011. Duración: 123 min. Género: Drama. Interpretación: Ralph Fiennes (Cayo Marcio Coriolano), Gerard Butler (Tullus), Brian Cox (Menenius), Vanessa Redgrave (Volumnia), Jessica Chastain (Virgilia), James Nesbitt (Sicinius), Lubna Azabal (Tamora), Dragan Micanovic (Titus Lartius), John Kani (general Cominius). Guion: John Logan; basado en la obra de William Shakespeare. Producción: Ralph Fiennes, Gabrielle Tana, Julia Taylor-Stanley y Colin Vaines. Música: Ilan Eshkeri. Fotografía: Barry Ackroyd. Montaje: Nicolas Gaster. Diseño de producción: Ricky Eyres. Vestuario: Bojana Nikitovic. Distribuidora: Emon. Estreno en Reino Unido: 20 Enero 2012. Estreno en España: 25 Enero 2013. Sinopsis: Coriolanus regresa a su patria como gran triunfador tras vencer a los invasores. Sin embargo, sus políticas le hacen impopular entre sus conciudadanos, que le condenan al exilio. Coriolanus, en un ataque de furia, se une a sus rivales para atacar a su país y se pone a las órdenes del que hasta ahora había sido su enemigo. Pero Coriolanus, ante su ciudad, dudará entre su orgullo y su patriotismo.

El cuarteto

Título original: Quartet. Dirección: Dustin Hoffman. País: Reino Unido. Año: 2012. Duración: 95 min. Género: Comedia dramática. Interpretación: Maggie Smith (Jean Horton), Tom Courtenay  (Reginald Paget), Billy Connolly (Wilf Bond), Pauline Collins (Cissy Robson), Michael Gambon (Cedric Livingston), Sheridan Smith (Dra. Lucy), Trevor Peacock (George), Michael Byrne (Frank White), Eline Powell (Angelique), Luke Newberry (Simon). Guion: Ronald Harwood, basado en su obra. Producción: Finola Dwyer y Stewart Mackinnon. Música: Dario Marianelli. Fotografía: John de Borman. Montaje: Barney Pilling. Diseño de producción: Andrew McAlpine.Vestuario: Odile Dicks-Mireaux. Distribuidora: Vértigo Films. Estreno en Reino Unido: 1 Enero 2013. Estreno en España: 25 Enero 2013. Calificación por edades: No recomendada para menores de 12 años. Sinopsis: La Casa Beecham es un hervidero. Circula el rumor de que esta residencia para músicos retirados pronto acogerá a un nuevo huésped. Y se dice que será alguien famoso. Para Reginald Paget (Tom Courtenay), Wilfred Bond (Billy Connolly) y Cecily Robson (Pauline Collins) es solo un cotilleo más. Cuando de repente ven entrar por la puerta a su ex compañera del cuarteto, Jena Horton (Maggie Smith), se quedan en estado de shock. Su carrera como solista, con el ego correspondiente que le acompañaba, acabó no sólo con su gran amistad, sino también con su matrimonio con Reggie, el cual se toma las nuevas noticias muy mal. ¿Puede el tiempo cerrar viejas heridas? ¿Podrá el famoso cuarteto solventar sus diferencias para la celebración de la gala en La Casa Beecham?

Efemérides musicales: El caballero de la rosa


El 26 de enero de 1911, en el Semperoper de Dresde (Alemania) se estrena la ópera El caballero de la rosa, de Richard StraussEl caballero de la rosa (título original en alemán, Der Rosenkavalier, Op. 59) es una ópera cómica en tres actos con música de Richard Strauss y libreto en alemán de Hugo von Hofmannsthal y el mismo compositor. El libretista optó en un primer momento por titularla Vetter von Land (el Primo del Campo) que luego cambió por Quinquin, mientras que Strauss prefería el título de Ochs auf Lechernau; finalmente coincidieron en el título actual. La historia transcurre en Viena, en el siglo XVIII, en los primeros años del reinado de la emperatriz María Teresa I.
Después de componer óperas como Salomé (1905) y Elektra (1909) -antes de éstas, había escrito Guntram y Feuersnot, pero fueron dos sonoros fracasos, y de las mismas no ha vuelto a tenerse noticia alguna)-, en donde asomaba la politonalidad, la atonalidad y el paroxismo expresionista, con un texto dramático influido por el vocabulario freudiano de las pasiones humanas, Strauss comunicó a Von Hofmannsthal su deseo de componer una ópera distinta, al estilo de la ópera mozartiana, ligera, humorística y ambientada en la sociedad del siglo XVIII (Las bodas de Fígaro). 
A diferencia de las óperas anteriores, el libreto de Von Hofmannsthal es original; es decir, que no está basado en obras literarias existentes. En el bosquejo inicial, los protagonistas iban a ser el barón Ochs y Octavian. Sin embargo, a medida que fue avanzando la escritura de la obra, el personaje de la Mariscala fue creciendo y afirmándose hasta transformarse en un rol protagónico.
El título de la ópera alude a una costumbre inexistente inventada por Von Hofmannsthal, que sirve de excusa para el desarrollo argumental.
El estreno en España tuvo lugar el 2 de abril de 1921, en el Gran Teatro del Liceo, de Barcelona.
El caballero de la rosa sigue siendo una de las óperas más populares; en las estadísticas de Operabase aparece la n.º 37 de las cien óperas más representadas en el período 2005-2010, siendo la 7.ª en alemán y la segunda de Richard Strauss, después de Salomé.

Argumento

La historia transcurre en Viena, en el siglo XVIII, en los primeros años del reinado de la emperatriz María Teresa I.
Acto I: Dormitorio de la Mariscala
Amanece mientras la Mariscala y su joven amante, Octavian, intercambian palabras de amor tras haber pasado una noche juntos.
Entra Mohamed, el criado negro de la princesa, con el desayuno y Octavian se esconde. Sale de su escondite cuando Mohamed se retira y la pareja sigue con su diálogo mientras toman el desayuno.
Se oyen ruidos fuera de la habitación. La Mariscala teme que su marido, que se halla de cacería lejos de Viena, haya regresado de improviso, por lo que Octavian se esconde y se disfraza de criada.
Robert Sterl: Ernst Edler von Schuch
dirige El caballero de la rosa
(Escena del Primer Acto,
Ochs/Notario) (1912)
Apartando a los lacayos, el barón Ochs, primo de la Mariscala, irrumpe en la habitación y comienza a hablar de su próximo matrimonio con Sophie, la hija del acaudalado burgués Faninal. Le pide a su prima que le recomiende a un noble que le entregue a Sophie una rosa de plata en señal de compromiso, de acuerdo a la costumbre. Durante la conversación, Ochs coquetea con “Mariandel”, la supuesta criada en que se disfrazó Octavian. Ochs se justifica ante la Mariscala diciendo que aún estando casado seguiría persiguiendo a campesinas y criadas.
Viendo la situación, la Mariscala propone a Octavian como portador de la rosa.
Es la hora en que la Mariscala recibe a las visitas y la habitación se llena de gente que acude a solicitar algún favor. Un tenor italiano ofrece un aria sentimental, mientras el barón discute con un notario sobre la dote de Sophie. Entre los visitantes se encuentra una pareja de intrigantes italianos, Annina y Valzacchi, que ofrece sus servicios al barón, quien los contrata para que localicen a Mariandel.
Todos se marchan y la Mariscala, en su soledad, piensa en el futuro de la prometida, entregada a un ser tan desagradable como su primo, y recuerda cómo fue obligada en su juventud a casarse con un hombre mayor al que no amaba. Estos recuerdos la llenan de melancolía, y le hacen reflexionar sobre el paso del tiempo y la vejez que se acerca irremediablemente.
Cuando Octavian regresa, la Mariscala le asegura que tarde o temprano encontrará una muchacha de su edad de la que se enamorará, y la abandonará para siempre. Esto enfurece al muchacho, que le asegura que nunca dejará de amarle. Cuando Octavian se marcha, la Mariscala repara en que no se ha despedido con un beso como era habitual y manda a sus criados a buscarle, pero ya no le encuentran. Entonces, le envía la rosa que ha de presentar a la prometida del barón.
Acto II: Sala de visitas en la casa de Faninal
En la mansión de Faninal se espera la llegada del caballero que entregará la rosa de plata. Faninal, muy nervioso, trata de calmar a su hija, mientras Marianne, el aya de Sophie, mira por la ventana la llegada de Octavian.
Richard Mayr como el Barón Ochs.
Anunciado por una multitud de lacayos, Octavian entra lujosamente vestido, y presenta la rosa de plata a Sophie, quien la acepta extasiada; cuando ambos cruzan sus miradas, comienzan a sentirse irresistiblemente atraídos.
Cuando la escolta se retira, ambos jóvenes se sientan a conversar, pero son interrumpidos por la entrada del barón Ochs, escandalizando a Sophie con sus groseros elogios. Luego, Ochs se retira a discutir el contrato de matrimonio con el padre de la joven.
La pareja se queda a solas. Sophie afirma que no se casará con el barón y ambos se abrazan declarándose su amor. Valzacchi y Annina los sorprenden y llaman a Ochs, pero este no da importancia a lo sucedido. Octavian dice al barón que Sofía jamás se casará con él y le reta a duelo. El barón se muestra inexperto con la espada y Octavian le hiere levemente.
En medio de la confusión, Sophie le dice a su padre que nunca se casará con Ochs, y Faninal amenaza con hacerle ingresar a un convento si no accede a casarse. Entre tanto, Octavian contrata los servicios de Annina y Valzacchi para salvar a Sophie de esta situación.
El barón, a quién los criados han dejado solo, se recupera del susto bebiendo vino. Annina entra con una carta de “Mariandel” en la que le pide una cita con ella, y Ochs vislumbra una conquista amorosa.
Acto III: Una habitación en una posada
Instigados por Octavian, Annina y Valzacchi preparan la trampa que le han tendido al barón. Poco después, entran Ochs y Mariandel para cenar en privado, mientras la falsa doncella se muestra tímida y nerviosa.
De repente unas extrañas apariciones se ven en distintos lugares de la habitación, dejando perplejo al culpable barón. Luego, Annina disfrazada de viuda, aparece con varios niños gritando que Ochs es su padre. Llega la policía, y Ochs en su defensa presenta a Mariandel como su prometida llamándola Sophie de Faninal, pero en ese momento aparece Faninal, quien llama a Sophie para que refute la absurda pretensión del barón.
Cuando Octavian susurra a la policía la verdad sobre su disfraz, entra la Mariscala y comprende rápidamente todo lo ocurrido, haciendo desistir a Ochs de su pretensión de casarse con Sophie.
La Mariscala se queda a solas con los jóvenes amantes y renuncia generosamente a Octavian a favor de Sophie. Luego abandona el lugar junto al padre de Sophie, quién se siente feliz por haber cumplido su deseo de ingresar en la nobleza.

Octavian y Sophie quedan solos, y llenos de dicha repiten su declaración de amor.
El caballero de la rosa combina una farsa de enredos al estilo de las comedias del siglo XVIII, centrada en el barón Ochs, con una profunda reflexión sobre el paso del tiempo, a cargo de la Mariscala. 
Estos dos temas destacan la oposición entre estos dos roles. El barón es un personaje burdo, lujurioso y pedante, mientras la Mariscala representa el pensamiento moderno, refinado e inteligente.
Si bien la trama está ambientada en el siglo XVIII, los temas tratados son enfocados desde las ideas del siglo XX. No hay censura alguna respecto del hecho que la Mariscala sea infiel a su marido con un joven adolescente, sino que por el contrario este personaje es tratado con respeto y afecto. Por otra parte, la intención del barón de casarse con Sophie se muestra en todo momento con sarcasmo e ironía, resaltando las aristas más viles y cínicas de esta unión. Finalmente, cuando Sophie descubre el tipo de persona que es el barón Ochs, decide no casarse con él, actitud que difícilmente sería tolerada en el momento en que transcurre la obra.
Los roles de Octavian y la Mariscala se corresponden con los de Cherubino y la Condesa en Las bodas de Fígaro de Mozart, pero mientras en ésta el amor de Cherubino hacia la Condesa no es correspondido, Strauss los presenta como amantes desde el comienzo de la ópera.
Al igual que en la citada ópera de Mozart, una mujer asume el papel de un joven, en este caso Octavian, pero en la obra de Strauss se acentúa la confusión sexual que esto provoca. En las primeras funciones a partir del estreno de esta obra, muchos espectadores se escandalizaron por el hecho de que la obra comience con una escena de alcoba entre dos mujeres, donde una de ellas toma el rol de un joven. Esta confusión se acentúa cuando el barón persigue a una criada que en realidad es un joven disfrazado de mujer, pero cuyo rol es representado por una mujer. Si bien una situación similar se presenta en Las bodas de Fígaro, no tiene un papel central dentro de la trama, como en esta ópera.
Una diferencia significativa respecto de Las bodas de Fígaro es que el libreto de Von Hofmannsthal carece del contenido social que subyace en la obra de Mozart. Mientras en la ópera de Mozart la trama pone en evidencia conflictos entre la aristocracia y las clases bajas (lo que motivó que la obra teatral en la que se basa estuviera prohibida en varias ciudades de Europa), en la obra de Strauss los conflictos se dirimen entre la aristocracia y la burguesía acomodada.
Casamiento a la moda de W. Hogarth
El libreto de Von Hofmannsthal evoca la ironía y el tono moralista de la obra Marriage à-la-mode (Matrimonio la moda), del pintor inglés William Hogarth. Esta obra relata a través de seis pinturas las nefastas consecuencias de un contrato matrimonial entre el hijo de un aristócrata en decadencia y la hija de un burgués millonario. La cuarta pintura de esta serie inspiró la escena del primer acto en la que la Mariscala recibe a las visitas, al notario, al peluquero y al cantante con el flautista.
Matrimonio a la moda de W. Hogarth




martes, 29 de enero de 2013

Presentación de libro


Portada
El miércoles 30 de enero de 2013 en el Museo de las Peñuelas (Melilla La Vieja), a las 19 horas (7 h. de la tarde), y a cargo de los ponentes, se presentará el libro AGENTES DE IGUALDAD EN CONTEXTOS EDUCATIVOS INTERCULTURALES "MUJER Y ARTE". Coordina Ana I. Lara Castaño.
Contraportada



lunes, 28 de enero de 2013

Biografías de cine; Paul Newman (I)


En el rostro de Paul Newman destacan,
en primer lugar, los ojos brillantes y azules;
luego, la boca sensual, que le hacen parecer
una estatua griega o quizás el David de Miguel Ángel.
 Al principio de su carrera,  el éxito se debió
a su extraordinario aspecto  físico, por lo que el público y
 buena parte de la crítica  tardó bastante tiempo en descubrir
el actor serio que se ocultaba bajo esa fachada .
El 26 de enero de 1925 nace Paul Leonard Newman, conocido artísticamente como Paul Newman en en Shaker Heights, condado de Cuyahoga, Ohio, Estados Unidos  actor, director y productor estadounidense, ganador de dos premios Oscar de la Academia de las Artes y las Ciencias Cinematográficas de Hollywood y un premio Globo de Oro de la Hollywood Foreign Press Association (Asociación de la Prensa Extranjera de Hollywood). También tuvo una actividad digna de destacar como piloto de automovilismo, siendo ya actor famoso, al alzarse con éxitos significativos en varias carreras. 
Fue hijo de Terézia Fecková, nacida en Ptičie, Imperio austrohúngaro, hoy en Eslovaquia, y de Arthur Samuel Newman, estadounidense judío, hijo de emigrantes húngaros y polacos. Cursa sus estudios elementales en la Malvern School y en la Shaker Heights High School. En 1942 ingresa en el Kenyon College universitario y al año siguiente se alista en la Armada de los Estados Unidos. Cumplió el servicio militar entre 1943 y 1945, en las bases de Okinawa y Guam. Tras servir en la Armada de los Estados Unidos durante la Segunda Guerra Mundial, volvió a Kenyon, donde se graduó en Ciencias Económicas y formó parte del equipo de fútbol americano. Estudió interpretación en la Escuela Dramática de la Universidad de Yale y en el famoso Actor's studio de Lee Strasberg.

Tras varios papeles de extra, figurante esporádico y secundario con poco papel en varias series de la televisión norteamericana (Suspense en 1949, The Web en 1952) y obras teatrales de Broadway, efectuó su debut cinematográfico en El cáliz de plata (The Silver Chalice, 1955) dirigida por Victor Saville, cinta bíblica de lujosa producción y regulares resultados a nivel de crítica y público en su estreno, donde compartía cartel con Pier Angeli y Virginia Mayo. Fue descrita por el propio Newman como "la peor película de la década". Su primer éxito le llegó dos años después con una película de enorme repercusión a nivel internacional, Marcado por el odio (Somebody Up There Likes Me, 1956) de Robert Wise, un biopic, en el que encarnó al boxeador Rocky Graziano en un papel al que también optaba Steve McQueen, y brillaba con una interpretación bastante notable al lado de dos jovencísimos Pier Angeli y Sal Mineo. Ese mismo año logra destacar en un film de ambiente judicial basado en una obra teatral que se apunta al éxito de Traidor en el infierno, de Billy Wilder: se trata de la notable Traidor a su patria (The Rack) de Arnold Laven, donde Newman trabaja con Walter Pidgeon y Wendell Corey en una trama de traiciones en el ámbito del espionaje militar. En 1957 repite con el director Robert Wise en un melodrama criminal donde comparte cartel con dos bellísimas Joan Fontaine y Jean Simmons: se trata de Mujeres culpables (Until They Sail), en su momento no estrenada en cines en Europa pese a su indudable atractivo. Ese mismo año estrena la biografía musical de la cantante Helen Morgan (quien luchó por salir del alcoholismo estando en la cumbre de su carrera) titulada Para ella un solo hombre, (de Michael Curtiz), al lado de la recordada actriz Ann Blyth. Tras esta cinta, Newman rueda cuatro películas  importantes que se estrenan en 1958: La gata sobre el tejado de zinc, de Richard Brooks, adaptación de la espléndida obra teatral de Tennessee Williams que marcó toda una época y que pone al actor en el "mapa" de la industria cinematográfica estadounidense por su impecable encarnación del atormentado hijo de un rico empresario enfermo, por su perfecta química en pantalla con una turbadora Elizabeth Taylor, y por no dejarse robar ningún plano frente a característicos del talento de Burl Ives o Jack Carson; El zurdo, (de Arthur Penn), revisión desmitificadora del legendario Billy the Kid que sólo triunfó en Europa, pero que es considerada película de culto, donde el actor realiza una composición bastante acertada; El largo y cálido verano, drama sureño basado en El Villorrio, de William Faulkner, y de generoso presupuesto, donde Newman trabaja por primera vez con Martin Ritt -uno de sus directores favoritos y cómplice de buena parte de su carrera profesional- y con la bella Joanne Woodward, -que acababa de ganar el Óscar a la mejor actriz dramática por una memorable interpretación de mujer con desdoblamiento de personalidad en el clásico Las tres caras de Eva (1957), de Nunnally Johnson-, de la que se enamora, además de compartir secuencias con sólidos compañeros como Orson Welles, Tony Franciosa, Angela Lansbury y Lee Remick, y por último Un marido rico, (de Leo McCarey, comedia fresca y agradable pero no muy redonda, no especialmente recordada hoy, a no ser por la presencia de una exuberante Joan Collins).

En 1959 estrena una historia equilibrada aunque poco vista sobre las presiones de la alta sociedad conservadora, en el personaje de un abogado joven y talentoso que lucha por abrirse camino, con el inevitable conflicto de amor, y para los seguidores del cine de tribunales, el desenlace electrizante en un juicio final breve e inesperado, La ciudad frente a mí (The Young Philadelphians), de Vincent Sherman, basada en la novela The Philadelphian de Richard P. Powell).


Pero la gran década de Paul Newman fue realmente la de los 60 del pasado siglo. En 1960 vuelve a trabajar con Joanne Woodward en un melodrama de relieve aunque mediano éxito comercial Desde la terraza (From the Terrace), de Mark Robson, en el que ambos coinciden con Myrna Loy y Peter Lawford. No obstante, vuelve a dar en la diana cuando entra en el reparto de una de las superproducciones más costosas y famosas de la historia: la adaptación del best seller de Leon Uris Éxodo (Exodus1960), que produce y dirige el célebre cineasta Otto Preminger. Aunque tachada de sionista por algunos, la cinta logra recrear en parte la realidad de la creación del Estado de Israel tras la 2ª Guerra Mundial, y cuenta con inolvidable reparto: Eva Marie Saint, Ralph Richardson y Sal Mineo, entre otros. El año 1961 parece dar un revés a la joven estrella, al estrenar dos cintas que pasan sin pena ni gloria: por un lado, la célebre pero en su momento algo incomprendida El buscavidas (The Hustler), de Robert Rossen, una de las mejores muestras del llamado "cine de perdedores" en la que tanto Newman como Piper Laurie, George C. Scott y Jackie Gleason logran magistrales actuaciones; por el otro, su segundo film con Martin Ritt, donde encarna a un joven músico de jazz que viaja a París con un compañero (Sidney Poitier) y ve actuar al mismísimo Louis Armstrong: Un día volveré (Paris Blues), film de poca solidez narrativa y dramática pero que conserva cierto encanto. Pero, desde 1962 en adelante, Newman va encadenando un éxito tras otro, en títulos destacados como Dulce pájaro de juventud (Sweet Bird of Youth, 1962), nueva adaptación de Tennessee Williams que supone para Newman reencontrarse con el gran director y guionista Richard Brooks y que, pese a las imposiciones de la censura norteamericana para con el texto original, le permite ofrecer una de sus mejores interpretaciones, sin desmerecer a sus compañeros de reparto -entre los que sobresalen Shirley Knight, Geraldine Page y Ed Begley-.
Cuando se tienen veinte años (Hemingway's Adventures of a Young Man, 1962) de nuevo a las órdenes de Ritt, en una de sus colaboraciones más famosas, donde el actor comparte protagonismo con Richard Beymer; Hud, el más salvaje entre mil (Hud,1963), otra vez bajo las órdenes de Martin Ritt y acompañado de los consagrados Patricia Neal y Melvyn Douglas en un drama psicológico enclavado en un ambiente rural y enmarcado en el mundo de los perdedores que tiene alcance); Samantha (A New Kind of Love, 1963) comedia ligera dirigida por Melville Shavelson donde vuelve a coincidir con su ya esposa Joanne Woodward, y con una estupenda Thelma Ritter en esta especie de versión del clásico de Vincente Minnelli Mi desconfiada esposa (1958); El premio (The Prize, 1963), cine de intriga claramente influido por el estilo de Alfred Hitchcock y basado a su vez en un best-seller de la época, realizado por Mark Robson y coprotagonizado por una deliciosa Elke Sommer; y Cuatro confesiones (The Outrage, 1964) de nuevo con Martin Ritt y con un completo reparto encabezado por Edward G. Robinson, Laurence Harvey y Claire Bloom, versión del clásico de Akira Kurosawa Rashōmon con resultados globales netamente inferiores. Le seguirían la comedia romántica Ella y sus maridos (What a Way to Go!, 1964) de J. Lee Thompson y Lady L (1965) dirigida y escrita por Peter Ustinov, adaptación de una novela de  Romain Gary y compartí cartel con Sofia Loren, David Niven, Michel Piccoli, entre otros.
Su consagración definitiva como estrella de Hollywood se da en 1966 con su participación en una superproducción de cine negro que hace historia: Harper, investigador privado (Harper) de Jack Smight, supone una renovación formal y estilística de un género ya en decadencia pero que este film actualiza y reinventa -e inicia un subgénero que recoge Frank Sinatra en su trilogía sobre el detective Tony Rome en Hampa dorada, El detective y La mujer de cemento-; es uno de los films más taquilleros del año en medio mundo, y la crítica internacional arropa un film brillante que contaba también con Lauren Bacall, Shelley Winters, Janet Leigh, Arthur Hill, Robert Wagner, Julie Harris... Ese mismo año, Newman rueda su único film con Alfred Hitchcock: Cortina rasgada (Torn Curtain) al lado de Julie Andrews, que supone un fracaso comercial bastante inmerecido y que cuenta una interesante trama al hilo de la Guerra Fría. 
Harper investigador privado (1966)
De aquí en adelante, la carrera del actor se consolida con películas de renombre y otras menos logradas pero de buena acogida: Un hombre (Hombre, 1967)de Martin Ritt, western psicológico donde Newman tiene un inolvidable duelo interpretativo con Fredric March y Richard Boone; La leyenda del indomable (Cool Hand Luke, 1967) de Stuart Rosenberg, primer título del actor con este director, que será uno de sus talismanes en los 70, y todo un clásico del género carcelario de todos los tiempos, donde el actor queda inmortalizado para la historia del cine junto a George Kennedy, Jo Van Fleet o Strother Martin; Comando secreto (The Secret War of Harry Frigg, 1968) de Jack Smight (mediocre thriller británico donde Newman sale airoso junto a Andrew Duggan y Sylva Koscina frente a un guion bastante flojo); Raquel (Rachel, Rachel, 1968) que supone su debut en la dirección, y una de las mejores radiografías de la condición femenina en la Norteamérica profunda, y otorga a Joanne Woodward una de sus mejores creaciones; Dos hombres y un destino (Butch Cassidy and the Sundance Kid, 1969), de George Roy Hill primera reunión de Newman con este director y con Robert Redford para uno de las películas clave de los 60 que revisitaba e innovaba en el western crepuscular y lograba uno de los mayores taquillazos de la década, suponía el descubrimiento de la malograda Katherine Ross y arrasaba en la entrega de los Oscar; 500 millas (Winning, 1969) de James Goldstone, reuniéndose de nuevo con su esposa en un film de carreras de coches que se apuntaba a la moda iniciada desde Aquellos chalados en sus locos cacharros en 1963 o La carrera del siglo en 1964; Un hombre de hoy, de Stuart Rosenberg (su peor película pese a trabajar con su esposa y la inevitable química entre ambos); Casta invencible (Sometimes a Great Notion, 1970),  su segundo film como realizador, logrado drama familiar con los rostros de Henry Fonda, Lee Remick y el hoy olvidado Michael Sarrazin; El juez de la horca (The Life and Times of Judge Roy Bean, 1972) de John Huston,en su primer encuentro con este enorme director, en un remake de la legendaria y magistral El forastero, de William Wyler, de 1940, en compañía de una madura pero todavía sensual Ava Gardner; Los indeseables (Pocket Money, 1972) de Stuart Rosenberg, western otoñal infravalorado por la crítica, donde Newman trabajaba con Wayne Robson y Lee Marvin en un film luego imitado hasta la saciedad, el guión es de Terrence Malick; Punto y aparte merece su tercera película detrás de las cámaras: El efecto de los rayos gamma sobre las margaritas (The Effect of Gamma Rays on Man-in-the-Moon Marigolds, 1972) de nuevo con Joanne Woodward como protagonista absoluta, supone el reconocimiento de crítica y público a nivel internacional y su entrada en la historia del séptimo arte en labores de autoría.  El golpe (The Sting, 1973) de George Roy Hill, que supone la segunda película de Newman-Redford y todo un fenómeno social en el momento de su estreno, basado en una obra teatral de prestigio, y El hombre de Mackintosh (The MacKintosh Man, 1973) de John Huston, thriller casi británico no maravilloso pero redimido por la actuación de Newman, de James Mason y de la fascinante Dominique Sanda

La madurez interpretativa del actor llega con su aparición en la superproducción que, junto a la anterior Aeropuerto de 1970, inicia el subgénero de cine catástrofe: El coloso en llamas (The Towering Inferno, 1974), de Irwin Allen y John Guillermin, al lado de otras estrellas como Steve McQueen, Faye Dunaway o Richard Chamberlain. Su siguiente proyecto es una secuela de Harper que tiene buen tono narrativo: Con el agua al cuello (The Drowning Pool, 1975), de Stuart Rosenberg. Sin embargo, con esta película se inicia una especie de declive en la carrera del intérprete, y la calidad de sus films posteriores empieza a ser más irregular: Buffallo Bill y los indios (Buffalo Bill and the Indians, or Sitting Bull's History Lesson, 1976), bajo las órdenes de Robert Altman, divide a crítica y público pese a conseguir el Oso de Oro en el Festival de Berlín y a la innegable calidad de algunas escenas y a su gran reparto (Joel Grey, Geraldine Chaplin, Harvey Keitel...); El castañazo (Slap Shot, 1977), de George Roy Hill, sólo consigue atrapar al público medio con una historia sobre el hockey donde Newman depura su método interpretativo para los papeles ligeros y brilla al lado de Melinda Dillon y Michael Ontkean; Quinteto (Quintet, 1979) de Robert Altman, Una de las peores películas de Altman. Elenco de lujo para una descafeinada entrega futurista. Tanto hielo en la acción como en el resultado; El día del fin del mundo (When Time Ran Out, 1980), de James Goldstone, intenta resucitar un cine de drama-catástrofe que, como mayor reclamo, empieza a caer en el olvido, con William Holden, Jacqueline Bisset y Burgess Meredith; Distrito Apache: El Bronx (Fort Apache, The Bronx, 1981) de Daniel Petrie, es un mero vehículo de lucimiento para el actor, de convencional trazado pero con un par de escenas memorables y excelente interpretación de Edward Asner; el telefilm La caja oscura, que continúa su línea de cine comprometido en la dirección, esta vez tratando la historia de las personas que sufren enfermedades mentales, y Ausencia de malicia (Absence of Malice, 1981), de Sydney Pollack, drama político donde Newman borda en un cambio de registro un papel de (presunto) cínico-liberal-corrupto emparejado a la siempre destacada Sally Field.

En 1982 el cotizado actor resurge para ofrecer una de las mejores interpretaciones de toda su carrera, nominación al Óscar incluida, en la fenomenal Veredicto final (The Verdict) de Sidney Lumet. Basada en un guion de David Mamet y con estructura teatral, Lumet construyó una pieza de enorme solidez, contundente y patética que deslumbra por su sencillez narrativa, los grandes trabajos de los inmensos Charlotte Rampling, Jack Warden, James Mason y Milo O´Shea y su confeso coqueteo con el eterno cine de perdedores, tan querido por el cine norteamericano clásico. La historia de un abogado fracasado que se encuentra con un caso fácil en apariencia pero con trasfondo de poder, logra conmover de principio a fin. Tras este alabado papel, Newman reactiva su carrera y logra la respetabilidad definitiva con Harry e hijo (Harry and Son, AKA Harry & Son, 1984), parcial autobiografía en sus relaciones con su hijo mayor, con el que salda cuentas a través de la realización del film y, sobre todo, con la revisitación de El buscavidas que Martin Scorsese le brinda en 1986: El color del dinero (The Color of Money)le hace ganar un merecidísimo Oscar al mejor actor, a la par que su último gran trabajo en pantalla. En 1987 rueda su última película como director: El zoo de cristal (The Glass Menagerie), una adaptación de la obra homónima de Tennessee Williams que recibió buenas críticas y que, ciertamente, se ve con interés por resultados y reparto (Joanne Woodward, Karen Allen y John Malkovich); El escandalo Blaze (Blaze, 1989) de Ron Shelton, Una pequeña tragedia americana en clave de farsa.
Desde entonces, el actor siguió rodando películas, la mayoría en colaboraciones de lujo o papeles principales, entre los que destacan títulos como Creadores de sombra (Fat Man and Little Boy ,1990) de Roland Joffé, también en 1990; la preciosista pero poco valorada Esperando a Mr. Bridge (Mr. and Mrs. Bridge) de James Ivory; la costumbrista Ni un pelo de tonto (Nobody's Fool, 1994) de Robert Benton; la comedia El gran salto (The Hudsucker Proxy, 1994) el excelente thriller con aroma de clásico Al caer el sol (Twilight, 1998) del mismo director, con un magnífico Newman secundado por Susan Sarandon y Gene Hackman, y la magnífica y nada despreciable Camino a la perdición (2002) de Sam Mendes, junto a Tom Hanks y Jude Law.
Paul Newman ha sido nueve veces nominado al Oscar de la Academia como actor: La gata sobre el tejado de zinc caliente (1958), El buscavidas (1961), Cuando se tienen veinte años (1962), Hud, el más salvaje entre mil (1963), La leyenda del indomable (1967), Veredicto final (1982), El color del dinero (1986), Ni un pelo de tonto (1994) y Camino de perdición (2002) (candidato al Oscar al mejor actor de reparto). Su Oscar conseguido por el film de 1986, El color del dinero, le llegó un año después de que recibiese el Oscar honorífico por sus "múltiples y  memorables interpretaciones en pantalla", y el actor reconociese perder la esperanza de obtener uno "de verdad" por una sola interpretación. Además fue candidato en una ocasión como productor por Rachel, Rachel. También se le concedió el premio especial de la Academia, Premio Humanitario Jean Hersholt, en 1994.
También fue nominado en 2003 al Emmy por su interpretación en Our Town, y en 2005 ganó el Premio Emmy al mejor actor de reparto por su papel en la lujosa miniserie Empire Falls. En 2006, ganó el Globo de Oro como mejor actor de reparto por la misma actuación.
Paul Newman falleció el 26 de septiembre de 2008 en su granja cerca de Westport (Connecticut).

Personalidad cinematográfica

Es a partir de 1960 cuando el actor norteamericano crea sus cuatro personajes más memorables en El Buscavidas, Hudel más salvaje entre mil, La Leyenda del indomable y Dos hombres y un destino, al tiempo que se consolidaba su imagen ya claramente reconocible.
Como arriesgado jugador profesional de billar obtuvo
 Newman uno de sus mayores éxitos en  El buscavidas
Su personalidad cinematográfica y privada ha estado muchas veces en extremos opuestos. Al igual que muchos alumnos del Actor's Studio, se consideraba  a sí mismo como un actor "cerebral" y a cada uno de sus papeles como una "agotadora sesión de estudio", y sin embargo, ha interpretado numerosos personajes espontáneos y desinhibidos, Newman ha encarnado con frecuencia a hombres encantadores  y seguros de sí mismos, a pesar de ser bastante tímido e inseguro en su vida privada. Comprometido apasionadamente con todas las causas humanitarias y liberales, Newma ha creado toda una galería de personajes egoístas  y que piensa únicamente en sí mismos; y aunque ha estado casado con una sola mujer la actriz Joanne Woodward, desde 1958, sus personajes atacan, insultan y rechazan a las mujeres, subordinándolas enteramente a la ambición masculina.
La ambición constituyó de hecho un aspecto clave de la imagen de Paul Newman. Algunos de sus personajes son de origen humilde y aspiran a realizar el sueño americano de la riqueza y el estatus social como en La ciudad frente a mi y Dulce pájaro de juventud dirigida por Richard Brooks. A otros no les interesas necesariamente el dinero, sino el triunfo en algún juego, como en la citada El buscavidas o en una carrera automovilística, como en 500 millas. El objetivo perseguido puede ser también el cumplimiento de una misión, como ayudar a los refugiados de Éxodo, a llegar a Palestina, o el de triunfar en el campo de la música como en Un día volveré, pero los medios son similares en todos los casos. Estos hombres ponen a un lado todas las consideraciones relacionadas con el amor, la familia, la humanidad y la moralidad, y avanzan implacablemente, alienándose al mismo tiempo en la sociedad en ese proceso.
Newman, como Luke Jackson en La Leyenda de un indomable,
la historia de un convicto que pasa dos duros años en un campo
 de trabajos forzados antes de morir y convertirse en un mito.
No obstante, las interpretaciones de Newman logran que los espectadores  se sientan identificados incluso con los personajes más arrogantes y egoístas, compartiendo con ellos sus problemas y obsesiones. Muchos de los tipos "sucios" interpretados por Newman poseen al menos una característica que los redime: el encanto. El aspecto juvenil de Newman y su sentido del humor hacen que resulten incluso atractivos. Por supuesto, ese atractivo depende en gran medida del aspecto físico del actor; puede encarnar a hombres irresponsables, duros y malvados, pero sus rasgos sugieren por el contrario sensibilidad e inteligencia.  
Por si fuera poco, sus interpretaciones de Brick en La gata sobre el tejado de zinc caliente, de Billy el Niño en El zurdo, ambas de 1958, y de Luke en La leyenda del indomable provocan simpatía a causa de la extrema soledad a la que le conducen sus acciones. Un buen número de personajes se humanizan también al tener que sufrir severos castigos físicos: en EL buscavidas le machacan las manos, Dulce pájaro de juventud le destrozan la cara; en El juez de la horca se ve continua y despiadamente torturado. Esa extrema degradación  y dolor crean una atmósfera de vulnerabilidad que facilitará la identificación del público con él.
En Hud, el más salvaje entre mil interpretaba a un ranchero amoral
cuya depravada forma de vida termina alejando  de su vida a a sus
amigos y familiares.
Pero quizás la razón más importante del atractivo de los héroes y antihéroes de Newman consiste en que parecen encarnar a la perfección el estado de ánimo dominante en su momento. En los papeles de los años 1950, interpretando personajes como el de Rocky Graziano (Marcado por el odio) y Billy el Niño (El zurdo), encajo en el molde Brandon/Dean, el de rebelde confuso y con dificultades para expresarse que se enfrenta al mundo y le devuelven los golpes sin saber por qué. El alejamiento de Rocky de un padre que no le hace el menor caso y las dificultades de Billy el Niño con todas las figuras paternales con las que se va encontrando a lo largo de su accidentada trayectoria, tocaban una cuerda muy sensible de los jóvenes espectadores de aquellos años, permitiendo la identificación de Newman  con los personajes interpretados tanto por James Dean como por otros jóvenes rebeldes del cine de aquella época.
Dos hombres y un destino
Redford y Newman.
Las aventuras reales de dos forajidos de principio del siglo XX
En la década de 1960, la imagen cinematográfica de Newman fue evolucionando, hasta convertirse en la de un rebelde relativamente "inteligente", capaz de controlarse mejor a sí mismo y de conocer las causas de su rebeldía. Los protagonistas de El Buscavidas, Dulce pájaro de juventud y Hudel más salvaje entre mil pueden, describir cuales son sus motivaciones y, aunque no se esfuerzan por mejorar la sociedad en la que viven, su propia capacidad de saber lo que las pasa y de expresarlo les conecta ya con la juventud de la era Kennedy.
Paradójicamente, la intención de Newman al interpretar a esos oportunistas sin escrúpulos era conseguir que el público los condenase. Esperaba demostrar que los hombres que poseen todo aquello que impresiona a los americano: atractivo, encanto, virilidad y habilidad, tanto para seducir a las mujeres como  para sentirse cómodos bebiendo entre los hombres, llevaban muchas veces dentro de ellos la "semilla de la corrupción" y triunfan sólo a costa de vender sus almas. Sin embargo, eran personajes vibrantes y magnéticos, y los espectadores se sintieron atraídos por ellos. 
Los famosos rasgos que tanto han contribuido 
al éxito continuado de Paul Newman. En El golpe 
interpretaba a un ingenioso delincuente 
que lograba engañar y estafar aun peligroso gángster.
La quintaesencia de todo estos personajes fue Hud, el amoral tejano moderno, que puede considerarse casi como un predecesor del malvado J. r: Ewing (Larry Hagman) de la popular serie de la década de 1980 (1978-1991); es decir, arrogante, maquiávelico, oportunista, incapaz de amar, profundamente corrompido... y, sin embargo, totalmente cautivador. Newman realizó un gran trabajo de interpretación, sacando a la superficie algunas de sus características cinematográficas: el aire cínico y distanciado, la voz nasal y desdeñosa, la sonrisa astuta e insinuante, la mirada helada y una sexualidad insolente. Los anuncios de la película afirmaban "Paul Newman es Hud". Aunque, en el fondo, esto distaba mucho de ser verdad, para el público Newman y Hud fueron la misma persona. (cont.)