Biografías de cine: D. W. Griffith (III)

(cont.)

• The Telephone Girl and the Lady (C) (1913). Una telefonista ayudará, por medio de su herramienta de trabajo, a una señora que está siendo objeto de un robo de unas joyas en su domicilio.
• The Mothering Heart (1913). Una joven pareja lucha por salir adelante, calmando siempre ella los problemas de su marido. Cuando por fin logran el éxito, él parece olvidar los valores familiares.
• The Wanderer (C) (1913). Un vagabundo, tras abandonar su hogar a la muerte de su madre, ayudará a una familia benefactora enfrentándose a una banda de usurpadores de tierras.

• La batalla de Elderbush Gulch (The Battle at Elderbush Gulch, 1913). Un grupo de colonizadores blancos son atacados por los indios. Después del terror y la muerte, la caballería aparece salvadora para rescatarlos.

• La matanza (The Massacre, 1913). Historia de la destrucción de un poblado indio.
• La vida del hombre primitivo (Brute Force, 1914). Una tribu primitiva es atacada por hombres mono y amenazada por diversos monstruos prehistóricos. Secuela de Man's Genesis. 

Un hito decisivo en su carrera lo representó Judith de Betulia (Judith of Bethulia (AKA Her Condoned Sin), 1914), que Griffith rodó como película de adolescentes que habían madurado y alcanzado el estrellato en la época de nacimiento de las fans, junto con el director de fotografía Bitzer, el montador James Smith y todo un conjunto de ayudantes y directores artísticos. Durante el asedio de la ciudad judía de Betulia por los asirios, una viuda llamada Judith seduce a Holofernes, general del ejército asirio, a quien asesina decapitándolo, convirtiéndose así en la heroína del pueblo judío.

Se trasladaron a la Realiance Majestic Company (que distribuía a través de la Mutual), y, entre abril y julio de 1914, rodaron la película en cinco bobinas La batalla de los sexos (The Battle of the Sexes) en sólo cinco días y con un presupuesto de 5.000 dólares.

También rodaron un melodrama no demasiado bien recibido por el público, de siete bobinas de duración, La evasión (The Escape); La película de seis bobinas Hogar, dulce hogar (Home, Sweet Home, 1914), en la que, por primera vez, trabajaron juntos todos los intérpretes de Griffith: John Howard Payne abandona su casa y comienza una carrera en el teatro. A pesar del apoyo moral de su madre y su novia, Payne comienza a llevar una vida de decadencia que pronto le lleva a la ruina y la miseria; y una exótica película de seis bobinas, La conciencia vengadora (The Avenging Conscience: or 'Thou Shalt Not Kill' (The Murderer's Conscience) (The Telltale Heart), 1914), basada en obras de Edgar Alian Poe. Un hombre comprueba como su relación con una hermosa muchacha se ve constreñida por el comportamiento de su tío. Una vez tomada la decisión, por fin decide asesinar al tío; sin embargo, cometido ya el crimen, la conciencia comenzará a pesar sobre él...

Parece ser que ninguna de estas producciones tuvo demasiado  éxito ni dramática ni comercialmente. Pero apenas importó. Seis meses después, el equipo Griffith había creado El nacimiento de una nación, y el rostro del cine cambió definitivamente.

Con El nacimiento de una nación (The Birth of a Nation), de 190 minutos de duración, en 1915, logró un éxito excepcional, dando al espectáculo cinematográfico sabor auténtico y original. Clásico del cine mudo que narra los acontecimientos más importantes de la creación de los Estados Unidos de América: la guerra civil, el asesinato de Lincoln, etc. Apenas veinte años después de la invención del cine, Griffith utiliza con una sabiduría de experto el primer plano, el montaje paralelo, el flash back y la profundidad de campo; y, por si fuera poco, sienta las bases de la narrativa y la tensión dramática del cine clásico de Hollywood. Pero además, El nacimiento de una nación tiene, casi cien años después, interés por sí misma. La historia de los Estados Unidos durante y después de la guerra civil americana está soberbiamente contada a partir de la relación entre dos familias del Norte y del Sur, con escenas memorables que van del intimismo de un paseo de enamorados a la grandiosidad de una batalla a campo abierto. Lamentablemente, la película es también de un racismo sangrante. No sólo se hace apología del Ku Klux Klan a lo largo de todo su último tercio, sino que los negros (¡interpretados por actores blancos con las caras pintadas!) son retratados de forma absolutamente atroz, en un discurso que habría firmado encantado, un par de décadas después, el mismísimo Hitler (se menciona expresamente el carácter “ario” de la raza blanca). Pero, si se puede hacer abstracción de ello, la película se convierte en un espectáculo visual y narrativo realmente conmovedor.

Otro de sus grandes filmes fue Intolerancia (Intolerance, 1916), 197 minutos, filme muy ambicioso para su tiempo y que resultó ser uno de los más caros de la historia del cine, aunque también uno de los más influyentes en futuros directores. Clásico del cine mudo que muestra a través de varios episodios históricos las injusticias provocadas por la intolerancia religiosa y social. La idea inicial de Griffith era narrar las sangrientas huelgas de 1912 en EE.UU. (un huelguista es acusado de la muerte de su patrón), pero después decidió rodar tres episodios más: La caída de Babilonia, La Pasión de Cristo y La noche de San Bartolomé (sangriento episodio de las luchas entre hugonotes y católicos que tuvo lugar en París en 1572). De presupuesto y recursos desmesurados para la época -una sola escena reunió a 15.000 extras y 250 carros- aún hoy sigue asombrando por su espectacularidad.

 En 1918 dirige:

• Corazones del mundo (Hearts of the World (Love's Struggle)). Película originariamente destinada a apoyar la entrada de los Estados Unidos en la primera guerra mundial.

• Lo más grande en la vida (The Greatest Thing in Life).

En 1919, junto con Charles Chaplin, Douglas Fairbanks y Mary Pickford, los artistas más cotizados del cine del momento, fundó la United Artists, para producir películas de larga duración al margen del control de los productores y financieros no creativos del cine. Griffith siguió realizando películas con su sello especial hasta el advenimiento del cine sonoro:

• Un mundo aparte (A Romance of Happy Valley). John Logan deja a sus padres y a su amada en Happy Valley para hacer fortuna en la ciudad.

• Pobre amor (True Heart Susie). Sussie está locamente enamorada de un joven de su pueblo, William Jenkins, y está dispuesta a conseguir su amor al precio que sea. Pero William desea escapar del pueblecito para ensanchar sus horizontes y debe realizar unos estudios que requieren una cantidad de dinero que él no posee. A escondidas, Sussie vende su vaca para obtener el dinero necesario para costear los estudios de William en la ciudad. A su regreso, William se ha convertido en un pastor protestante pero es seducido por una ex-actriz convertida en costurera, Bettina Hopkins. William se casará con Bettina ignorando que Sussie, quien se mantiene en el anonimato, había sido su protectora.

• El mayor problema (The Great Question). Una huérfana es entregada en acogida por una familia de granjeros, pero pronto se encuentra en las garras de un granjero asesino y su esposa.

• Dias rojos (Scarlet days). Un romántico bandido llamado Álvarez, buscado por asaltos a los campamentos mineros de la fiebre del oro en California en 1849, es reformado por el amor de una buena mujer.

• Sobre las ruinas del mundo (The Girl Who Stayed at Home). Trata la historia de dos hermanos que viajan a Francia para combatir en la Primera Guerra Mundial, la mujer que los ama y un americano expatriado que vive en Francia quien combatirá por su país de facto.

• The Mother and the Law. 

• Lirios rotos (AKA La culpa ajena) (Broken Blossoms). Una inocente joven que vive en un claustrofóbico ambiente en el barrio londinense de Limehouse, es brutalmente maltratada por su padre, un ex boxeador alcohólico. En este sórdido lugar, vive una historia de amor con un noble chino, que, incluso lejos de su tierra, trata de vivir conforme a su filosofía de paz y armonía, pero su idealista visión del mundo choca con la cruda realidad.

Comenzó la década de 1920 con tres películas:

• Las dos tormentas (Way Down East). Anna Moore es una joven que va a visitar a Bostón a su acaudalada tía para que ayude a su familia a salir de la pobreza, pero una vez allí un hombre rico la engaña con un matrimonio falso para poder aprovecharse de ella. Cuando Anna se queda embarazada se destapa el engaño y es abandonada a su suerte.

• Flor de amor (The Lover Flower). Un hombre mata al amante de su esposa y escapa con su hija al Pacífico Sur. Un policía le seguirá la pista.

• The Idol Dancer.

Al año siguiente dirige dos películas:

• La calle de los sueños (Dream Street, 1921). Tres hombres compiten en Londres por el amor de una mujer.

• Las dos huérfanas (Orphans of the Storm, 1921). Louise Girard es una huérfana aristócrata que fue abandonada a las puertas de un convento después de la muerte de sus padres. Es acogida en casa de Girard, un pobre hombre, y crecerá con Henriette Girard, su hermana adoptiva. Cuando ambas llegan a la edad adulta se dirigen a París en busca de un futuro mejor. Allí Henriette suplanta la personalidad de Louise y se casa con un aristócrata. Louise se casa con el Chevalier de Vaudrey que es el único que cree en ella. Estalla la Revolución francesa y ambas se vuelven a ver unidas por las circunstancias. Presenta a un Danton y un Robespierre totalmente corruptos a los que los que menos les interesa es el bien del pueblo. La desorganización y la injusticia son atribuidas como parte fundamental de esta revolución, totalmente al contrario de la loa que hace él mismo a la Guerra de Secesión...

En 1922 dirige la película de intriga One Exciting Night (1922).

Al año siguiente, Flor que renace (The White Rose, 1923). Un joven y rico aristócrata sureño, Joseph, se gradúa en el seminario, y antes de hacerse cargo de sus responsabilidades decide irse a pasear por el mundo. Acaba en Nueva Orleans, donde se ve atraído por una chica pobre y huérfana, Bessie. Una cosa llevará a la otra, y al final Bessie se encontrará embarazada de Joseph.

En 1924: 

• Isn't Life Wonderful (1924). Cuenta la historia de una familia de refugiados polacos en Alemania, en los duros tiempos posteriores a la I Guerra Mundial. Tendrán que lidiar contra el hambre, la inflación y la falta de trabajo.

• América (1924). En el marco de la Guerra de la Independencia, narra la historia de amor entre Nathan Holden, miembro de una familia de Virginia partidaria de que la joven Norteamérica se independice del yugo del rey Jorge, y Nancy, una muchacha que pertenece a los Montague, adeptos a la corona inglesa.

Un año después dirigió: 

• Sally, la hija del Circo (Sally of the Sawdust, 1925). Perdida durante mucho tiempo y restaurada recientemente, esta película es una de las escasas comedias en la carrera de D.W. Griffith. La trama gira en torno a un prisionero e ilusionista del circo que trata de impedir que su hija descubra que en realidad ha sido adoptada al morir su madre, una mujer de clase alta que se casó con un hombre del espectáculo sin consentimiento de sus padres. La muchacha se enamora de un joven de sociedad, con las complicaciones previsibles...

• Crimen y castigo (That Royle Girl, 1925). Joan Royle, una guapa pero ingenua modelo se enamora de Fred Ketlar. La mujer de Fred, Adele, es asesinada, y Fred acusado de haber cometido el crimen. Joan cree que el auténtico autor del crimen es Baretta, un gangster con quien Adele mantenía una relación amorosa.

La tristeza de Satán (The Sorrows of Satan) es una película de 1926, es una adaptación de una novela de Marie Corelli que proponía una variación sobre la temática de Fausto. 

En 1927 dirige Topsy y Eva o La fildelidad de una esclava (Topsy and Eva), Película basada en la obra de Catherine Chisholm Cushing, La cabaña del tío Tom. Topsy, una chica negra, intenta ser tan habilidosa y útil como Eva, quien compró a Topsy en una subasta de esclavos por tan solo un nickel.

En 1928, rodó:

• La batalla de los sexos (The Battle of the Sexes). Un respetable hombre de negocios y padre de familia, pierde la cabeza por una rubia callejera.

• Su mayor victoria (Drums of Love). Al descubrir que su padre y patrimonio están en peligro, la princesa Emanuella se casa con el poco agraciado duque Cathos de Alvia. Ella en realidad está enamorada de Leonardo, su atractivo hermano menor. Su adúltera relación estará marcada por la tragedia... 

En 1929 dirigió la que sería su última película silente La melodía de amor (Lady of the Pavements). Karl, un diplomático alemán afincado en Paris, descubre que su prometida, Diane, le ha estado engañando. Le dice que preferiría casarse con una "chica de la calle" antes que con ella. Diane, ultrajada, decide contratar una bailarina española de mala reputación, para convertirla en una chica refinada y concertar una cita con Karl.

Incluyendo las producciones para la Realiance-Majestic Griffith rodó 32 largometrajes tras su salida de la Biograph. 
Su última película y segunda sonora fue La lucha (The Struggle, 1931), un alegato contra los peligros del alcoholismo,que, aunque se vio posteriormente reivindicada por la crítica, fue un aplastante fracaso comercial sobre todo al estrenarse un año después su primera película sonora, Abraham Lincoln (1930), en la que hace un repaso a la vida del famoso presidente norteamericano. No fue un éxito en su momento, pero recientemente se ha considerado como una de las películas definitivas sobre el presidente. A pesar de esto, la película contiene bastantes inexactitudes históricas, tales como, hacer que Lincoln pronunciase su segundo discurso inaugural en el Teatro Ford poco antes de ser asesinado, alterando significativamente los debates Lincoln-Douglas convirtiendolos en una discusión sobre la secesión, y presentando el romance entre Lincoln y Ann Rutledge. El cine sonoro significó su fin como director.

En sus diecisiete restantes años de vida, Griffith no volvió a hacer nada. Se vio rechazado por los estudios, después de que hubiese creado prácticamente él solo la industria del cine, y olvidado por el público. Cuando la D. W. Griffith Corporation se declaró en bancarrota y us películas se vieron subastadas cobró sólo 500 dólares por los derechos de 21 de ellas.

Griffith fue descubierto inconsciente en el vestíbulo en el Hotel Knickerbocker en Los Angeles, donde había estado viviendo solo. Murió de una hemorragia cerebral el 23 de julio de 1948, a las 3:42 p.m. en el camino a un hospital de Hollywood. Un gran servicio fúnebre se celebró en su honor en el Masonic Temple Hollywood, pero pocas estrellas fueron a darle su últimos respetos. Está enterrado en el Monte Tabor Iglesia Metodista Cementerio en Centerfield, Kentucky. 
La leyenda del cine Charles Chaplin Griffith lo llamaría "El maestro de todos nosotros." “Para nosotros”, dijo Lillian Gish, su mayor estrella, “Mr. Griffith era la industria del cine, que había nacido de su cabeza”. Este sentimiento fue ampliamente compartido. Cineastas tan dispares como John Ford, Alfred Hitchcock, Orson Welles, Lev Kuleshov, Jean Renoir, Cecil B. DeMille, King Vidor, Victor Fleming, Raoul Walsh, Carl Theodor Dreyer, Sergei Eisenstein y Stanley Kubrick ha hablado de su respeto por el director de Intolerancia. Orson Welles dijo: "Realmente nunca he odiado a Hollywood a excepción de su tratamiento a DW Griffith. Ningún pueblo, ninguna industria, ninguna profesión, ninguna forma de arte debe tanto a un solo hombre."
Sin embargo, la industria cinematográfica demostró ser menos respetuosa con el cineasta. Las historias de Griffith examinaban obsesivamente el tema de la virtud acosada; una y otra vez colocaba a sus jóvenes amantes, sus heroínas inocentes y sus indefensos niños en situaciones comprometidas de las que normalmente (aunque no siempre) eran rescatados en el último momento. Con su afición al romanticismo y a la obra de Dickens se aferró firmemente al punto de vista de que entretenimiento y educación debían ser la misma cosa y que la belleza y la juventud eran su propia justificación, y no sólo la belleza de aspecto, sino también de carácter y comportamiento. Se trataba de un enfoque que iba perdiendo aceleradamente puntos frente al creciente cinismo de la época, pero al que Griffith se mantuvo con fe inquebrantable.

Estrella en el Paseo de la Fama de Hollywood
en el 6535 Hollywood Blvd.

Se le atribuyen la realización de más de 500 películas y colaboró en la creación de muchos otros.