martes, 13 de marzo de 2018

Biografías de cine: Hugo Santiago

Hugo Santiago Muchnik nació en Buenos Aires. Estudió filosofía y literatura en la Universidad de Buenos Aires, donde conoció a Jorge Luis Borges. En 1959, fue becado por el Fondo Nacional de las Artes y viajó a París, donde estuvo durante siete años, siendo asistente y discípulo de Robert Bresson. Regresó a fines de la década de 1960 a Buenos Aires y realizó Invasión, con guion original de Borges y Adolfo Bioy Casares. Complots, sospechas, secretos fueron los temas favoritos de este brillante cineasta argentino. 
Tal vez fuera el encuentro de este joven argentino, en plenos estudios de filosofía, con José Luis Borges quien determine, si no su vocación, al menos su estilo. Este novelista, asociado a otro faro de la literatura, Adolfo Bioy Casares, le ofrece a Hugo Santiago el guion de su primer largometraje, Invasión. Presentado en la Quincena de Realizadores en 1969, la película fue una sensación. Sin dudas porque la exuberancia del joven cineasta está ahí, constantemente, confrontado con la austeridad de Robert Bresson, del que fue asistente. "Su rigor formal me ha engañado", dice Santiago más tarde.  La película se convirtió en un raro objeto de culto. Su trama trata de una ciudad sitiada, Aquilea (cuya fisonomía oculta los rasgos de Buenos Aires), por misteriosos invasores que pretenden apoderarse de ella. La indiferencia de sus habitantes les allanará el camino; sólo un pequeño grupo de resistentes, guiados por un anciano trata de impedir la acción de los invasores en una lucha desigual. la película, que contaba, como hemos dicho, con guion de Borges y Bioy Casares, mezclaba el policial negro con el género fantástico.
Vuelto a Francia de nuevo, repitió colaboración con Borges y Bioy en en castellano Los otros (Les autres, 1974): Spinoza trata de descubrir las causas por las cuales su hijo se suicidó. Encuentra un escrito que había dejado su hijo y también a su novia y a quien era rival de su hijo en sus afectos. Spinoza se convierte en su amante y cuando aparece asesinada es acusado de su muerte. Para ilustrar cómo diferentes personas tienen impresiones contradictorias de la persona que ha sido importante en sus vidas, el papel del padre es interpretado en cada caso por actores completamente diferentes. La película provocó un escándalo durante su proyección en Cannes. 
En El juego del poder (Écoute voir...,1979) Catherine Deneuve interpreta a una especie de Philip Marlowe en versión femenina que se ve envuelta en una trama delirante de sectas y modernas tecnologías. El joven aristócrata Arnaud de Maule contrata al detective privado Claude Alphand para investigar un culto extraño, la Iglesia del Renacimiento Final, que intentó reclutar a su novia Chloé, que luego desapareció, y ahora lo acechan.
La última película en francés fue Las veredas de Saturno (Les Trottoirs de Saturne, 1985), con guion del escritor argentino Juan José Saer, retoma la saga de Invasión en la historia de un tanguero de Aquilea exiliado en París. Fabián Cortés (Rodolfo Mederos) es un bandoneonista de Aquilea, un país en plena dictadura militar. Exiliado, vive en Francia, donde es un músico reconocido. Sin embargo, sueña con volver a su país. Su hermana Marta, militante de una agrupación de izquierda, viaja con sus compañeros a buscarlo.
En 2009 empezó la tercera parte de esa trilogía, con la película que cerraría la saga.
Desde mediados de los años 1980, Santiago se dedicó casi exclusivamente a la realización de lo que él mismo denomina "objetos audiovisuales":
- Electra (1986), sobre la tragedia de Sófocles.
- La gesta gibelina (1988), sobre La Orestíada de Xenakis.
- Enumeraciones (1989), inspirada en la Ceremonia musical de Georges Aperghis. 
- La voz humana (1989), a partir de la tragedia lírica de Francis Poulenc y Jean Cocteau) y
- La vida de Galileo (1991), puesta en escena de la obra de Brecht.
No se trata de documentales en sentido convencional. El cine se aproxima a una obra preexistente sabiendo que su naturaleza ceremonial es irreproducible.
La fábula de los continentes (1992), ópera cinematográfica compuesta en colaboración con Georges Aperghis, es una película radical, donde el cine, la ópera, y la novela de aventuras se asocian para hacer surgir un nuevo género.
En los años siguientes su atención se concentró en una serie singular de "documentales de arte":
- Christophe Coin', el músico (1995),
- Maurice Blanchot (1998)
- Mosaiques y Beethoven (1999), o
Maria Bethânia' de Brasil (2001)
-En estas obras Hugo Santiago asedia a sus personajes hasta obtener alguna verdad sobre su poética.
El lobo de la costa Oeste (Le loup de la côte Ouest, 2002), fue la película que ha supuesto su regreso al cine de ficción después de largo tiempo. Lew Millar, célebre detective privado americano de la costa oeste de Estados Unidos llega a Francia, contratado por un viejo americano afincado desde hace más de veinte años en Biarritz. Nick Nemo quiere que Millar se encargue personalmente de su protección: su vida está en peligro, unos días antes han intentado asesinarle. 
Durante el año 2007 Santiago iba a completar la trilogía de Aquilea, con la futura película Adiós, algo que no sucedió.
El cielo del centauro (Le ciel du centaure, 2015) fue su última película. El Ingeniero no había venido nunca a América del Sur. Su navío, navegando hacia la Patagonia, hace escala, al alba, en Buenos Aires, de donde volverá a zarpar al día siguiente… 
Hugo Santiago falleció el 27 de febrero de 2018 en París. Tenía 78 años. 

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