Las 30 mejores películas de ciencia-ficción y dónde verlas (IV)

14. Robocop (1987), de Paul Verhoeven

Ambientada en una sociedad futura. Alex J. Murphy, agente de policía de Detroit, es asesinado en acto de servicio. Para acabar con la delincuencia en la ciudad, las autoridades aprueban la creación de una máquina letal, mitad robot, mitad hombre, a la que llaman Robocop, y para fabricarla utilizan el cuerpo de Murphy. El experimento parece un éxito, pero el policía, a pesar de estar muerto, conserva la memoria y decide vengarse de sus asesinos. La película combina violencia, sátira social y crítica al corporativismo con una estética cyberpunk. 

La anécdota: Convertirse en Robocop no fue fácil. Peter Weller, el actor que dio vida al policía cibernético, perdía más de un kilo al día por culpa del traje. Estaba hecho de fibra de vidrio, tardaba 11 horas en colocarse y era tan sofocante que tuvieron que instalarle aire acondicionado interno. Pero eso no era lo peor: el traje era tan voluminoso que no cabía en el coche patrulla, así que en muchas escenas solo llevaba la parte superior. Estas estrecheces evitaron que Schwarzenegger fuera el protagonista: no entraba. Disponible en Prime Video, Movsitar+. Filmin.

15. Desafío total (Total Recall, 1990), de Paul Verhoeven

La Tierra, año 2084. Doug Quaid, un hombre que lleva una vida aparentemente tranquila, vive atormentado por una pesadilla que todas las noches lo transporta a Marte. Decide entonces recurrir al laboratorio de Recall, una empresa de vacaciones virtuales que le ofrece la oportunidad de materializar su sueño gracias a un fuerte alucinógeno, pero la droga hace aflorar a su memoria una estancia verdadera en Marte cuando era el más temido agente del cruel Coohagen. Ciencia-ficción con tintes paranoicos y acción explosiva, basada en un relato de Philip K. Dick. 

La anécdota: Sharon Stone no necesitó dobles para repartir golpes en Desafío total. Se entrenó en Tae Kwon Do y sorprendió a todo el equipo por su intensidad. Paul Verhoeven quedó tan impresionado que empezó a verla como algo más que una secundaria. Schwarzenegger tuvo que usar protección en sus genitales durante las escenas de pelea. La química entre ambos era explosiva, y la energía de Stone tan magnética que Verhoeven no dudó en convertirla en protagonista de Instinto básico poco después. Disponible en Netflix, Filmin

16. Parque Jurásico (Jurassic Park, 1993), de Steven Spielberg

El multimillonario John Hammond consigue hacer realidad su sueño de clonar dinosaurios del Jurásico y crear con ellos un parque temático en una isla remota. Antes de abrirlo al público, invita a una pareja de eminentes científicos y a un matemático para que comprueben la viabilidad del proyecto. Pero las medidas de seguridad del parque no prevén el instinto de supervivencia de la madre naturaleza ni la codicia humana. Un hito del cine de aventuras y efectos especiales que revolucionó el blockbuster moderno. 

La anécdota: En la cinta, hay una escena que marcó a toda una generación: el T-Rex aparece bajo la lluvia, rompe la valla eléctrica y se abalanza sobre el coche donde están los niños. Lo que pocos saben es que Steven Spielberg decidió no avisar a los actores infantiles de lo que iba a ocurrir. El techo del vehículo iba a ser aplastado por el animatrónico del dinosaurio, y el director quería capturar una reacción auténtica. Lo consiguió. El grito de los niños no fue actuación, fue puro pánico. Sam Neill, que también estaba en la escena, tuvo que calmarles tras el corte. Spielberg se disculpó después. Disponible en Apple TV y Prime Video.

17. Doce monos (12 Monkeys, 1995), de Terry Gilliam

Año 2035. Tras la epidemia provocada por un virus asesino que ha matado a millones de personas, los supervivientes se refugian en comunidades subterráneas, húmedas y frías. El prisionero James Cole se ofrece como voluntario para viajar al pasado y conseguir una muestra del virus, gracias a la cual los científicos podrán elaborar un antídoto. Durante el viaje conoce a una bella psiquiatra y a Jeffrey Goines, un excepcional enfermo mental. Cole tratará de encontrar al ”Ejército de los 12 Monos”, un grupo radical vinculado a la mortal enfermedad. La película mezcla viajes temporales, conspiraciones y locura en una narrativa compleja y visualmente inquietante.

La anécdota: Para dar vida a un personaje frenético, paranoico y verbalmente desbordado, Brad Pitt tuvo que entrenar su forma de hablar hasta convertirla en una ráfaga incontrolable. Terry Gilliam le pidió velocidad, nervio, desorden. Pitt trabajó con un coach para desarmar su dicción perfecta y construir un perfil que no dejara respirar al espectador. El resultado fue tan salvaje que el equipo técnico a veces no entendía lo que decía. Pero funcionó. El actor se llevó su primera nominación al Oscar. Disponible en SkyShowtime, Movistar+, Filmin.

18. Gattaca (1997), de Andrew Niccol

Ambientada en una sociedad futura, en la que la mayor parte de los niños son concebidos in vitro y con técnicas de selección genética. Vincent (Ethan Hawke), uno de los últimos niños concebidos de modo natural, nace con una deficiencia cardíaca y no le auguran más de treinta años de vida. Se le considera un inválido y, como tal, está condenado a realizar los trabajos más desagradables. Su hermano Anton, en cambio, ha recibido una espléndida herencia genética que le garantiza múltiples oportunidades. Desde niño, Vincent sueña con viajar al espacio, pero sabe muy bien que nunca será seleccionado. Durante años ejerce toda clase de trabajos hasta que un día conoce a un hombre que le proporciona la clave para formar parte de la élite: suplantar a Jerome (Jude Law), un deportista que se quedó paralítico por culpa de un accidente. De este modo, Vincent ingresa en la Corporación Gattaca, una industria aeroespacial, que lo selecciona para realizar una misión en Titán. Todo irá bien, gracias a la ayuda de Jerome, hasta que el director del proyecto es asesinado y la consiguiente investigación pone en peligro los planes de Vincent. Una reflexión sobre la identidad, la discriminación y el espíritu humano frente a la ingeniería genética.

La anécdota: El título esconde un código: G, A, T y C, las bases del ADN. Cuatro letras que definen quién eres antes de que puedas decidirlo. Mientras tanto, en el set, Ethan Hawke y Uma Thurman se enamoran. La química entre ellos no se escribió en el guion, se filtró en cada plano. Un año después se separaron. Disponible en Movistar+.