viernes, 25 de enero de 2019

Cine para niños: Tres aventuras que nos llevará al fin del mundo

Déjese secuestrar por unos piratas, dar puñetazos en las profundidades de las selvas de Brasil, construir un hidroavión con dos cerillas... La aventura es mejor en el cine. Descubra nuestra selección de películas para ver en familia.
¿Quiere sol y calor? ¿El gris de enero parece no acabar nunca y los niños están hoscos? Para una buena cura de luminoterapia, emprendamos un viaje al otro lado del mundo, hacia el cielo siempre azul, mares claros y fantásticas aventuras...

1.- El hombre de Río (L’homme de Rio, 1964), de Philippe de Broca

La historia en dos palabrasEl soldado francés Adrien Dufourquet (Jean-Paul Belmondo) está a punto de pasar una semana de permiso más ajetreada de lo esperable. Mientras se dirige a París para visitar a su novia (François Dorleac), se produce el robo de una estatuilla de origen amazónico en el Museo del Hombre de la capital. Los ladrones se llevan, además, al profesor Chatillón, miembro de la expedición que halló el objeto, y a su novia. Cuando Adrien aterriza en París tiene que seguir el rastro de los secuestradores hasta Río, Brasilia y el corazón del Amazonas.
Argumentos para hacer que se interesen: Si les gusta Tintin, Los niños encontrarán en la película de Broca el espíritu aventurero de los álbumes de Hergé, los siniestros malvados de los papeles secundarios, los cocodrilos en los ríos, las flechas envenenadas y Belmondo, quien, como Tintín, roba una motocicleta, pilota un avión de hélice, circula a tumba abierta en un descapotable rosa, buscando una estatuilla guatemalteca como en La oreja rota (L'oreille cassée)...
Lo que aprenderánQue Catherine Deneuve (la princesa de la piel de burro) tenía una hermana, Françoise Dorleac, que interpreta perfectamente a la  aventurera nada mojigata, a lo Katherine Hepburn. Incluso podrán comparar el trabajo de los dos hermanas viendo Mi hombre es un salvaje (Le Sauvage, 1975), de Jean-Paul Rappeneau, donde Catherine, a su vez, interpreta a una temeraria fugitiva junto con un capitán Haddock (Yves Montand) más real...
El momento que más les gustará: Todas las escenas son antológicas, y los diálogos bien construidos. Pero, si es necesario elegir uno, este será el de la pelea general en la cantina: Belmondo da puñetazos a todo el mundo deteniéndose lo justo para tomar un buche de cerveza, sólo para volver con más coraje. Y cada golpe hace una onomatopeya de dibujo animado: "pif", "bam", "ouch"…

2. Viento en las velas (A High Wind in Jamaica, 1965), de Alexander Mackendrick 

La historia en dos palabras: En el siglo XIX, los niños de un plantador inglés instalado en Jamaica son capturados por un pirata que los toma bajo su protección. Pero la flota británica los está buscando... En esta película de bucaneros filmada en Cinemascope por el director inglés de El quinteto de la muerte (The Ladykillers, 1955), los niños son los héroes.
Argumentos para hacer que les guste: ¡No solo hay Piratas del Caribe en la vida! Antes de Johnny Depp, Anthony Quinn también era carismático y realmente atemorizaba... Y si es Vd. listo durante la proyección, los niños pueden ir de vacaciones allí, así que busque las playas (sin estrés, no tiene porque ser este verano...).
Lo que aprenderán: Que si sienten que los  malos pensamientos crecen en ellos, es normal: la infancia está hecha de estos pequeños pulsiones diabólicas que tenemos en nosotros ... Crecer es lograr transformar estos malos impulsos en las buenas acciones. No está todo ganado, pero Anthony Quinn es un niño tan agradable que le perdonas todo. Así que sé insolente, pero con una sonrisa y conseguirá todo.
El momento que más les gustará: Todas las escenas de la vida a bordo del barco pirata. Estos momentos, incluso más que los abordajes o las tormentas, son auténticos aspectos de la vida: los niños hacen tonterías, luchan entre sí, muerden a los piratas, beben alcohol... ¡Como en casa, pero mejor!

3.- Seis días y siete noches (Six Days Seven Nights, 1998)de Ivan Reitman

La historia en dos palabras: Robin Monroe es una famosa editora de revistas femeninas en Nueva York, y para pasar las vacaciones elige como destino una maravillosa isla del Pacífico, a la que acudirá en compañía de su novio. Para poner la guinda a unas vacaciones perfectas, el novio de Robin se declara y le pide matrimonio, proposición que aceptará sin dudar. Todo se complica cuando Robin recibe una urgente llamada del trabajo y tiene que volver a Nueva York. Para llegar a tiempo, Robin deberá recurrir al piloto Quin Harris, la única persona en toda la isla que puede llegar a Tahití, desde donde sale el avión. Quinn es un hombre huraño que se ha retirado a vivir en la isla en busca de la paz interior. Durante el viaje, su aeroplano se estrella y vivirán una experiencia límite en mitad de la isla en una aventura en la que lucharán por su supervivencia a la espera de que aparezca un avión de rescate.
Argumentos para hacer que les interese: Dos palabras: Indiana Jones. El placer de encontrar a Harrison Ford, sin látigo o pistola, convertido en un viejo piloto gruñón. Y también la alegría de jugar a los Robinsones suizos: cómo luchar, después de una tragedia, en terreno hostil. Y luego, se parece un poco al día en que tuvimos una avería en la carretera de regreso de casa de la abuelita, excepto que es más divertido.
Lo que aprenderán: 1. A convivir con una hermanita un poco cansina. 2. La existencia de la comedia americana, ese género donde aunque los personajes se gusten muy poco al principio, arrojándose nombres de pájaros a la cara, acabarán gustándose mucho al final. Podremos continuar la enseñanza con un Frank Capra, por ejemplo Sucedió una noche (It Happened One Night, 1934), que las disputas llevan al amor. "¿Como tú con mamá? Bueno sí, en fin, es allgo un poco más complicado..."
El momento que más les gustará: Cuando Harrison Ford, a lo McGyver, transforma su avión en un hidroavión con lo que tiene a mano. Credibilidad mínima, eficacia máxima. 

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